El Mago

El Mago está de pie, bien asentado sobre la Tierra. Vemos su torso de frente como símbolo de la armonía interna centrada en el corazón. Su mirada atenta a la estrella, alta en el horizonte del tiempo futuro, hacia donde encamina su andar. Empuña firmemente el cetro del poder de la inteligencia creadora, con la que capta el fuego del cielo y lo derrama sobre la materia de la Tierra, fluyendo por su mano izquierda.

el mago

el mago

Su brazo derecho, en ángulo recto, nos indica que domina las «normas» dimensionales de las formas densas. Lleva la peluca azul de los iniciados del templo, señal de que su mente irradia la fuerza del espíritu al haber dominado y «amaestrado» la serpiente arcaica microcósmica luego de «despertarla», anudándola en su cintura (chakra Manipura) y convirtiéndola en símbolo del infinito.

Él «habita» en el cielo y en la Tierra, por lo que domina el fluido astral que manipula con su cetro y el poder de su voluntad entrenada. Domina los cuatro elementos en sí mismo y, por la ley iniciática de que «lo semejante se conoce por lo semejante», es capaz de sintetizar los polos opuestos que generan las formas sólidas en los tres mundos.

Ello está simbolizado por el cubo, que a su frente sostiene los emblemas de los cuatro elementos. Vemos allí la Espada de la vitalidad, la Copa y el Pentáculo de oro. El cetro está en poder del propio Mago.

CETRO COPA ESPADA PENTACULO
Fuego Agua Aire Tierra

Esta relación gobierna todos los arcanos menores del TAROT, ligados a los 22 arcanos mayores. Así pues, la causa primera es el Mago. Es el principio de toda actividad. En el universo es Dios, el UNO, considerado como el gran impulsor de todo lo que se realiza en el cosmos: en el hombre es el Yo soy, el centro superior de conciencia y voluntad que crea nuestra personalidad, ya que el hombre tiene la misión de «crearse a sí mismo» a «imagen y semejanza» del Creador.

La magna presencia del Y o SOY EL QUE SOY en el Mago opera en el mundo de las formas que antes ha aprendido a conocer. Por ello hace visible y tangible el rayo de luz-sustancia que, a partir de este arcano -el que «mueve» la rueda del tarot-, simboliza el trasfondo violeta de todos los arcanos mayores. El violeta de la llama del Séptimo Rayo, que en el comienzo de esta nueva era va renovando los símbolos perennes de la eterna sabiduría.

Significados para la predicción

Esotérico: El Mago hace el gesto «Coagula, Salva», recogiendo la fuerza divina para desparramarla sobre el mundo.

Psicológico: La sensación psíquica del yo.

Positivo: Voluntad, inteligencia, presencia de ánimo, originalidad, creatividad, destreza, ingenio, autocontrol, determinación para completar tareas, capaz de influir en los demás, autonomía.

Negativo: Voluntad débil, indecisión, charlatán, estafador, explotador de la candidez humana.